07 diciembre 2024

EJERCICIO FÍSICO E HIPERTENSIÓN

 




👟🏊‍♀️💪 EJERCICIO FÍSICO E HIPERTENSIÓN

 

👟🏊‍♀️💪 El ejercicio físico es un apoyo muy importante para el paciente hipertenso.

 

👟🏊‍♀️💪 Así lo han demostrado distintos estudios, como el publicado publicado en European Journal of Preventive Cardiology en enero de 2022

 

https://academic.oup.com/eurjpc/article/29/1/205/6168858

 

👟🏊‍♀️💪 Según recuerda este metaanálisis, alrededor del 25% de los infartos en Europa se atribuyen a la hipertensión, y se calcula que, en 2025, alrededor del 60% de la población tendrá cifras de presión arterial por encima de lo recomendado. Por eso, incluir el ejercicio físico en la rutina diaria es hoy más importante que nunca.

 

👟🏊‍♀️💪 Por tanto, todos los tipos de entrenamiento como entrenamiento de resistencia aeróbica, como correr, nadar o montar en bici; entrenamiento de fuerza dinámica, como el ejercicio dinámico con mancuernas; y entrenamiento de fuerza isométrica, como las planchas y sentadillas disminuyen las cifras de tensión arterial.

 

👟🏊‍♀️💪 Por eso es recomendable que, dependiendo de las características de cada paciente, se planifique de manera individualizada el ejercicio físico.

 

👟🏊‍♀️💪Pero, en cualquier caso, lo fundamental es que ese ejercicio forme parte de nuestra rutina.

 

👟🏊‍♀️💪 Es la razón de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiende desde hace más de tres décadas la práctica deportiva como una de las medidas no farmacológicas más importantes destinadas a disminuir los valores de tensión arterial.

 

 

👟🏊‍♀️💪 *** Hoy os traigo este estudio reciente en que un equipo de científicos del University College de Londres y la Universidad de Sídney en Australia han concluido que, incluso una pequeña cantidad de ejercicio al día, puede mejorar la presión arterial.

 

👟🏊‍♀️💪 Incorporar incluso unos pocos minutos de actividades físicas de mayor intensidad, como caminar a paso ligero o andar en bicicleta, a las rutinas diarias puede marcar una diferencia en los niveles de presión arterial, explicó Jo Blodgett, investigadora principal del Instituto de Deporte, Ejercicio y Salud del University College de Londres y líder del trabajo que publica la revista Circulation.

 

👟🏊‍♀️💪 El estudio transversal contó con la participación de unos 15.000 voluntarios.

 

👟🏊‍♀️💪 Analizaron cómo una composición de movimiento de 24 horas de seis comportamientos (dormir, comportamiento sedentario, estar de pie, caminar lento, caminar rápido y actividad similar al ejercicio) se relacionaba con la presión arterial sistólica y diastólica y cómo el cambio de tiempo entre dos comportamientos podría afectar potencialmente a ambas.

 

👟🏊‍♀️💪 Cada participante usó un dispositivo acelerómetro portátil en su muslo para medir su actividad y presión arterial durante el día y la noche. 

 

👟🏊‍♀️💪 Descubrieron que reemplazar el comportamiento sedentario con 20-27 minutos de ejercicio por día podría reducir potencialmente la enfermedad cardiovascular hasta en un 28 por ciento y que incluso solo cinco minutos de actividad al día podían reducir potencialmente la presión arterial.

 

👟🏊‍♀️💪 Subir escaleras en vez de coger el ascensor o ir en bicicleta a las tiendas es suficiente para tener un efecto positivo.

 

👟🏊‍♀️💪 La presión arterial alta se clasifica como una lectura de 140 milímetros de mercurio (mmHg) o más cuando la sangre se bombea a través de las arterias (lo que se conoce como presión sistólica) y de 90 mmHg o más cuando el corazón está en diastólica, o en reposo. 

 

👟🏊‍♀️💪 Subir escaleras o montar en bici, reducen la presión arterial sistólica en 0,68 mmHg  y la presión arterial diastólica en 0,54 mmHg, según los datos. Y estos cambios en la presión arterial pueden significar un menor riesgo de enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular.

 

👟🏊‍♀️💪La buena noticia es que, aunque no estemos en muy buena forma física, no son necesarias grandes dosis de ejercicio para ver un cambio positivo en la presión arterial de nuestro organismo.

 

👟🏊‍♀️💪 Los investigadores apuntan a que cinco minutos sería el tiempo mínimo para ver algún tipo de cambio en la presión arterial y 10 o 20 minutos representaría el tiempo suficiente de ejercicio para ver mejoras clínicamente significativas en la presión arterial.

 

👟🏊‍♀️💪 Vamos que una simple caminata rápida podría marcar la diferencia.

 

👟🏊‍♀️💪 El hallazgo de que hacer tan sólo cinco minutos adicionales de ejercicio por día podría estar asociado con lecturas de presión arterial más bajas enfatiza cuán poderosos podrían ser los períodos cortos de movimiento de mayor intensidad para el control de la presión arterial, concluyeron los expertos.

 

👟🏊‍♀️💪 Sea como fuere, el estudio es observacional, lo que significa que puede mostrar asociaciones, pero no puede decir con certeza que el aumento de la actividad provoque mejores niveles de presión arterial.

Pero como el equipo analizó datos de un grupo tan grande de personas, sí que existe una fuerte indicación de que una pequeña cantidad de ejercicio puede afectar la presión arterial (que, a su vez, es algo que otros estudios anteriores también ya habían sugerido).

 

https://www.ahajournals.org/doi/10.1161/CIRCULATIONAHA.124.069820

 

👟🏊‍♀️💪*** Comportamientos de movimiento y presión arterial medidos por dispositivos durante 24 horas: análisis de datos de participantes individuales en 6 partes en el consorcio ProPASS

6 de noviembre de 2024

 

👟🏊‍♀️💪 Más tiempo dedicado a hacer ejercicio o dormir, en relación con otros comportamientos, se asoció con una presión arterial más baja.

 

👟🏊‍♀️💪Cinco minutos adicionales de actividad similar al ejercicio se asociaron con reducciones estimadas de -0,68 mmHg (IC del 95 %, -0,15, -1,21) de PAS y -0,54 mmHg (IC del 95 %, -0,19, 0,89) de PAD.


👟🏊‍♀️💪Se estimaron mejoras clínicamente significativas en PAS y PAD después de 20 a 27 minutos y 10 a 15 minutos de reasignación de tiempo en otros comportamientos a ejercicio adicional.

Aunque pasar más tiempo sedentario se asoció 

negativamente con la PAS y la PAD, el impacto de 

estar de pie o caminar fue mínimo.


👟🏊‍♀️💪 CONCLUSIONES:


Los resultados del estudio reiteran la importancia del 

ejercicio para controlar la presión arterial, lo que 

sugiere que pequeñas cantidades adicionales de 

ejercicio están asociadas con una presión arterial 

más baja en un entorno de vida libre.